Muchas mentes, un proyecto: el American Folk Art (AFAM) es una colección de multitudes. Con ocasión del 60º aniversario del Museo, las muestras en exposición aprovechan el sentido figurado de esta expresión para utilizarlo como metáfora del vasto alcance de los fondos del Museo y sus muchos creadores. Desde sus inicios en la década de 1960 y cada vez con más ímpetu con el correr del tiempo, el AFAM se ha desarrollado como una “colección de colecciones”, un resultado a la vez unificado y que manifiesta numerosas perspectivas.

 

El concepto de multitudes es omnipresente en toda la exposición, como refleja el propio proceso artístico: desde gestos repetitivos y seriales, así como actos organizadores de sistematización, memorización, elaboración de inventarios y creación de moldes de personajes. Mientras tanto, en las salas, las agrupaciones nos llevan a considerar la creación artística y la colección como prácticas creativas alineadas, cada una de las cuales contribuye a la formación de la identidad y la creación del mundo. Las obras, que se presentan de forma no cronológica, se encuentran agrupadas visualmente para revelar no solo su individualidad sino también sus características compartidas y sus patrones subyacentes.

 

La colección del AFAM, que abarca cuatro siglos, reúne una rica variedad de voces, experiencias y actitudes, que producen un conjunto de objetos correspondientemente diversos: creaciones de base comunitaria arraigadas en antiguas tradiciones; objetos funcionales pero muy estéticos que reflejan prácticas populares generalizadas; obras distintivas creadas por personas neurodivergentes fuera del ámbito artístico; obras como fragmentos que conforman mitologías privadas de toda la vida. La identidad de la colección del Museo rechaza los límites artificiales y discriminatorios que prevalecen en las narrativas dominantes de la historia del arte y que suelen constreñir a los artistas capacitados formalmente. Por el contrario, se ha formado y reformado a lo largo de los años con creadores recién añadidos e ideas frescas. La idea de multitudes invita a la reflexión sobre las complejidades de la multifacética colección del Museo, que continúa evolucionando y forma parte de un todo más grande, que constituye más que la suma de sus partes.

 

Curadoras: Emelie Gevalt y Valérie Rousseau

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